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-Editorial
Uno de los desafíos a los que se enfrenta en todo el mundo es la tasa de infección de los profesionales de la salud al tratar a los pacientes con COVID-19.
Aunque Ruanda está en camino de cumplir la mayor parte de la cuota requerida, el país no puede permitirse el revés que causaría una pandemia como COVID-19 entre los profesionales de la salud.
Para minimizar el tiempo de contacto con casos confirmados y, por lo tanto, reducir el riesgo de contaminación de los profesionales de la salud en los centros de tratamiento COVID-19, se desplegaron robots. En los centros de tratamiento de Gatenga y Kanyinya en la ciudad de Kigali, las visitas del personal médico a los pacientes pasaron de 3 a 4 a 2 por día desde mayo de 2020. Los 5 robots de tamaño humano están programados para realizar controles de temperatura, tomar lecturas de signos vitales y enviar mensajes de video y detectar personas que no usan máscaras y luego indicarles que usen máscaras correctamente.
El martes 19 de mayo en el Centro de Tratamiento Kanyinya COVID-19, el Ministerio de Salud lanzó los 5 robots. Nombrados en Kinyarwanda, Akazuba, Ikirezi, Mwiza, Ngabo y Urumuri están hechos por Zora Bots, una empresa belga especializada en robótica. Fueron adquiridos a través de una asociación entre el PNUD Rwanda Accelerator Lab (AccLab) y el Ministerio de TIC e Innovación. Cada robot cuesta alrededor de $30,000.
Actualmente, Urumuri está desplegado en el Aeropuerto Internacional de Kigali con la capacidad de detectar de 50 a 150 personas por minuto e informar sobre anomalías a los oficiales de servicio.
Mientras Ruanda reabre el Aeropuerto Internacional de Kigali para vuelos comerciales internacionales a partir del 1 de agosto, Urumuri permitirá acelerar los controles masivos de fiebre para los pasajeros mientras aterrizan.
Se han utilizado robots inteligentes antiepidémicos en Asia para ayudar a aplanar la curva COVID-19. La pandemia ha demostrado ser un desafío transversal que afecta a Ruanda en todos los sectores (salud, economía, educación, agricultura, …). Por lo tanto, requiere diferentes soluciones a veces innovadoras con recursos disponibles como robots.
