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Por: Ellie Burgueño
Los retos y desafíos que las mujeres empresarias enfrentamos hoy en día son muchos, ya que seguimos en la lucha por la igualdad de derechos y un trato digno, así como la lucha por el reconocimiento de nuestros logros y capacidades.
Enumerar los retos más relevantes es una tarea que nos damos para ampliar el panorama y poder identificar cuáles son aquellos con los que nos topamos de manera más continua y lograr adquirir las herramientas para enfrentarlos y superarlos.
En pleno siglo XXI las mujeres emprendedoras aún nos enfrentaos a barreras invisibles o un “techo de cristal” por temor al riesgo.
En México, el 51% de la población está compuesto por mujeres, pero solo 34% es parte de la Población Económicamente Activa y en el sector emprendedor solo participan 19% de mujeres, según cifras de la aceleradora de negocios femeninos Victoria147.
Hoy por hoy todas queremos ser más independientes y tenemos diversas aspiraciones.
En una sociedad cambiante, los hombres se involucran cada vez más en tareas del hogar y las mujeres están más insertas en el mundo laboral, aún hay obstáculos que las hacen meditar entre ser madres o iniciar un proyecto de negocio.
- Un circulo de apoyo
Un circulo de apoyo es muy importante para la mujer emprendedora. El apoyo moral de familiares y amigos cercanos es muy importante porque es el primer círculo que rodea a las mujeres. En él podrán encontrar consejos, ánimo y hasta financiamiento.
- Obstaculos mentales
Cuando una compañía promueve a un hombre para un puesto superior, él asume la responsabilidad y el riesgo teniendo el 68% de las capacidades y conocimientos. Una mujer lo hace cuando se siente 95% preparada, las mujeres sueles prepararse más para competir en el mundo laboral donde seguimos teniendo una gran desventaja ante los hombres.
- Selección de pareja
Por miedo a quedarse solas, las mujeres eligen a parejas equivocadas, personas que no les permiten crecer, desarrollarse y que retrasan sus proyectos de vida. Es importante estar con la persona a la que haces brillar y que te hace brillar, alguien que no te robe tu energía, que sea tu apoyo y tu confidente, tu amigo y tu motivación para lograr en vez de un obstáculo para salir adelante.
- Miedo al fracaso
El principal reto que enfrentamos para iniciar una empresa es el miedo al fracaso, pero enfrentarlo y fallar en proyectos ha sido la solución para crecer, según la mayoría de mujeres experimentadas en las empresas comentan,
- Formación y capacitación
El Gobierno, cámaras empresariales y asociaciones civiles ofrecen programas y apoyos para los emprendedores; sin embargo, es necesario que tengan mayor difusión. Con información, las emprendedoras tendrán la oportunidad de escoger qué es lo que quieren hacer, tomar decisiones y asumir responsabilidades.
- Conocer más historias de éxito
Cuando las mujeres se dan cuenta de que hay más historias como las de ellas y que sin importar las dificultades esas mujeres cumplieron sus metas y sueños, ellas también se inspiran, coinciden las expertas.
- Infraestructura adecuada
Para que las mujeres puedan dedicarle suficiente atención a sus proyectos es necesario que las escuelas amplíen sus horarios y haya más guarderías cerca de las oficinas, ya que el obstáculo para el progreso de muchas mujeres es justamente la falta de opciones tanto del cuidado de los hijos como educativas.
- Buscar el fondeo para el proyecto o negocio
La banca comercial, las microfinancieras y el Gobierno han diseñado productos específicos para los emprendedores. Si la mujer sabe cuánto dinero necesita, cuáles son sus capacidades de pago no hay ningún problema en solicitar créditos a una institución bancaria o al gobierno.
- Equilibro entre negocio y familia.
El desafío empresarial es el de equilibrar negocio y familia. Las mujeres son la espina dorsal de la familia y a menudo suelen verse divididas entre el compromiso con la familia y el desarrollo de negocios. ¿Cómo manejar ese desafío? La respuesta radica en la gestión del tiempo y la delegación y habitualmente en la elección del compañero de viaje.
- Control del estrés.
El último, pero no el menor desafío, es el estrés y la dura competencia asociada con la ejecución de un negocio. El proceso emprendedor de construir un negocio desde cero implica trabajo duro, compromiso y persistencia. El negocio es un juego duro y, con frecuencia, cuando una mujer es dura, los hombres no lo soportan.
Cuando una se enfrenta a este tipo de desafíos, hay que utilizar el arte de la delegación y la gestión del tiempo. Conseguir delegar las tediosas tareas del negocio y concentrarse en las cuestiones de gestión y dirección.
Tu habilidad para superar estos desafíos empresariales es lo que te hará una emprendedora exitosa.