Ghislaine Maxwell, exasociada de Jeffrey Epstein y condenada en 2022 por tráfico sexual de menores, ha expresado su disposición a testificar ante el Congreso de Estados Unidos sobre su papel en la red de abuso sexual facilitada por Epstein. Maxwell, quien cumple una sentencia de 20 años de prisión, es la única persona condenada por cargos relacionados con la operación de tráfico sexual que presuntamente involucró hasta mil víctimas.
Su ofrecimiento de testificar surge en medio de una renovada presión política sobre el caso. La semana pasada, el Departamento de Justicia (DOJ) y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) publicaron un memorando en el que afirmaron que no hay evidencia de que Epstein mantuviera una lista de clientes o que haya utilizado chantajes para controlar a individuos poderosos implicados en actos sexuales ilegales con menores.
Pese a la conclusión del DOJ, varios legisladores demócratas están impulsando la publicación completa de los archivos relacionados con la investigación de Epstein. El representante Ro Khanna (D-Calif.) anunció planes para presentar una enmienda a la Ley GENIUS, un proyecto de ley sobre criptomonedas, con el fin de obligar a la fiscal general Pam Bondi a compilar y publicar todos los documentos relacionados con Epstein.
“La crítica que recibo es que Biden debió haber hecho esto. Bien. Pero, ¿qué es lo mejor ahora para el público? Si en el futuro tenemos un presidente demócrata y los republicanos dicen que apoyan Medicare para Todos o impuestos a los ricos, no los criticaría por el pasado. Diría: excelente, hagámoslo”, expresó Khanna.
El representante Marc Veasey (D-Texas) también afirmó que presentará una resolución exigiendo que la administración de Trump publique los archivos.
“O @realDonaldTrump y sus seguidores alimentaron los rumores sobre la importancia de estos archivos de Epstein para beneficiar su campaña, ¡o hay algo ahí! Por eso el lunes presentaré una resolución exigiendo que la administración Trump libere todos los documentos relacionados con el caso Epstein. ¡O lo publican o se callan!”, escribió Veasey en X.
Aunque es poco probable que estas iniciativas avancen en el Congreso, sus promotores esperan generar atención pública y presionar a los legisladores republicanos. El Comité de Reglas de la Cámara, que revisará la enmienda de Khanna, está controlado por el Partido Republicano, lo que hace improbable su aprobación.
El DOJ declaró que no publicará más archivos sobre Epstein, citando la privacidad de las víctimas y la preocupación por la desinformación. Esta decisión se produjo tras la difusión de un video de vigilancia que, según autoridades federales, confirma que Epstein se suicidó en su celda en 2019. Sin embargo, las inconsistencias del caso, incluyendo fallas de seguridad y los vínculos de Epstein con figuras influyentes, han mantenido viva la especulación pública.
La fiscal general Bondi había prometido previamente total transparencia en la investigación. A principios de este año, el DOJ desclasificó 200 páginas de documentos relacionados con Epstein, muchos de los cuales ya circulaban en filtraciones. No obstante, Bondi reconoció después que miles de páginas no se habían publicado y ordenó una revisión interna para investigar el retraso.
Epstein, un financista con conexiones internacionales, fue arrestado en 2019 por cargos federales de tráfico sexual y murió bajo custodia en el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York. Su muerte, oficialmente declarada como suicidio por ahorcamiento, generó controversia y sospechas sobre posibles encubrimientos.
Añadiendo más confusión, Elon Musk publicó recientemente, y luego eliminó, una afirmación en redes sociales en la que señalaba que Donald Trump había sido cliente de Epstein. La publicación reavivó brevemente teorías conspirativas sobre la magnitud de los vínculos de Epstein con élites políticas y empresariales.