El presidente electo Donald Trump fue sentenciado sin sanciones el viernes en un caso penal en Nueva York relacionado con pagos de dinero en secreto. El fallo se dio a conocer a solo diez días de su toma de posesión para un segundo mandato como presidente. El juez Juan Merchan, de Manhattan, impuso un “descargo incondicional”, una sentencia que no incluye tiempo en prisión, libertad condicional ni multas.
El juez Merchan tenía la autoridad para sentenciar al republicano de 78 años a hasta cuatro años de prisión tras su condena por 34 cargos de delito grave por falsificación de registros comerciales. Sin embargo, Merchan optó por una resolución que evitó posibles desafíos constitucionales, permitiendo que Trump asumiera la presidencia, convirtiéndose en el primer delincuente condenado en ocupar el cargo.
En sus declaraciones, Merchan destacó su obligación de considerar factores agravantes, pero reconoció que las protecciones legales de Trump como presidente electo eran un “factor que supera a todos los demás”. Merchan agregó: “A pesar de la extraordinaria amplitud de esas protecciones legales, no otorgan el poder de borrar un veredicto del jurado”.
El caso, conocido formalmente como El Pueblo del Estado de Nueva York contra Donald J. Trump, surge de acusaciones de que Trump falsificó registros comerciales para ocultar un pago de $130,000 realizado a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels durante la campaña presidencial de 2016. Los fiscales argumentaron que los pagos se realizaron para suprimir información sobre un supuesto encuentro sexual entre Trump y Daniels, influyendo así en el resultado de la elección.
El fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, acusó a Trump de falsificar estos registros con la intención de cometer delitos, incluidos violaciones a las leyes federales de financiamiento de campañas, fraude fiscal y esfuerzos para influir en la elección. Los cargos marcaron la primera acusación penal contra un expresidente de los Estados Unidos y culminaron en un juicio en mayo de 2024.
Durante el juicio, la fiscalía llamó a 20 testigos, incluido el exabogado de Trump, Michael Cohen, quien facilitó los pagos. Cohen testificó que utilizó fondos de su línea de crédito hipotecario y fue reembolsado posteriormente por Trump mediante acuerdos falsificados de honorarios legales. Los fiscales argumentaron que estas acciones formaban parte de un esfuerzo coordinado para ocultar los pagos.
La defensa sostuvo que Trump desconocía cualquier irregularidad, calificó a Cohen como un testigo poco fiable y afirmó que los pagos eran gastos legales legítimos. El equipo legal de Trump también buscó, sin éxito, que el caso fuera desestimado, que se retrasara el proceso o que el juicio se trasladara a un tribunal federal.
El 30 de mayo de 2024, Trump fue declarado culpable de los 34 cargos, convirtiéndose en el primer presidente de los Estados Unidos condenado por un delito grave. El juicio se complicó aún más debido a la campaña presidencial en curso de Trump y sus repetidos comentarios sobre el caso, que resultaron en una condena por desacato penal en abril de 2024.
Tras retrasos debido a las elecciones de 2024 y preocupaciones constitucionales relacionadas con la sentencia de un presidente electo, Merchan programó la audiencia para el 10 de enero de 2025. La decisión del juez de imponer un descargo incondicional cerró efectivamente el caso mientras sostenía el veredicto del jurado.
El equipo legal de Trump ha indicado que planea apelar la condena. Mientras tanto, el caso se suma al controvertido legado de Trump mientras se prepara para asumir el cargo por segunda vez.