En una época en la que la inteligencia artificial está transformando las artes creativas, una banda llamada The Velvet Sundown ha encendido uno de los debates más curiosos de la industria musical: ¿se trata de una banda real o de una ilusión generada por IA?
Con un sonido descrito como una rica mezcla de rock psicodélico estilo años 70 y experimentación ambiental, The Velvet Sundown ha capturado la atención de miles de oyentes. Hasta esta semana, el grupo ha acumulado más de 634,000 oyentes mensuales en Spotify. Canciones como “Dust on the Wind”, “Drift Beyond the Flame” y “End the Pain” han ganado popularidad gracias a listas de reproducción compartidas de manera orgánica, lo que ha generado especulación sobre su origen.
La controversia no radica en la calidad de su música, sino en el misterio que rodea a la banda. A pesar de contar con la verificación oficial de artista en Spotify y de tener una biografía que menciona a sus supuestos miembros—Gabe Farrow, Lennie West, Milo Raines y Orion “Rio” Del Mar—no hay registros públicos ni huellas digitales que confirmen la existencia de ninguno de ellos. Los esfuerzos de periodistas y fanáticos por encontrar entrevistas, videos de presentaciones en vivo o señales tradicionales de una banda humana no han tenido éxito.
Alimentando aún más las sospechas están los elementos visuales de la banda, que parecen generados por IA: portadas de álbumes con paisajes desérticos surrealistas, ojos flotantes y arquitectura imposible, acompañados de voces y letras que algunos describen como uniformes o carentes de matices emocionales.
Su página de Instagram comparte imágenes estilizadas del grupo, pero muchas de ellas parecen generadas por inteligencia artificial. No hay videos de conciertos, fechas de presentaciones ni contenido detrás de cámaras, elementos habituales en una banda activa. Esta falta de transparencia ha llevado a muchos a concluir que podría tratarse de un proyecto creado por una IA avanzada, entrenada con décadas de historia del rock y capaz de imitar la composición y producción humanas.
El grupo—o alguien que dice representarlo—respondió a las acusaciones el 30 de junio a través de X (antes Twitter), escribiendo: “Esta es nuestra música, escrita en noches largas y sudorosas en un bungalow apretado en California con instrumentos reales, mentes reales y alma real”. La publicación acusó a los periodistas de suposiciones “perezosas y sin fundamento”, afirmando que la banda está compuesta completamente por humanos.
Curiosamente, varios periodistas respondieron al mensaje ofreciendo agendar entrevistas. La cuenta respondió afirmativamente a esas solicitudes, pero hasta el momento no se ha concretado ni publicado ninguna.
Este debate surge en medio de una reflexión cultural más amplia sobre la creciente influencia de la IA en la música. El cambio en la política de monetización de Spotify en 2024—que elimina ingresos para canciones con menos de 1,000 reproducciones anuales—ha afectado desproporcionadamente a los artistas pequeños e independientes. Algunos temen que si las plataformas siguen promoviendo bandas creadas por IA como The Velvet Sundown, los músicos humanos queden aún más marginados.
Recientemente, un comercial completamente generado por IA llegó a la televisión. El primer anuncio televisivo hecho íntegramente con inteligencia artificial se transmitió durante el Juego 3 de las Finales de la NBA. Fue creado por el director Sam Accetturo utilizando Veo 3 de Google. El anuncio muestra escenas surrealistas que promueven la plataforma de apuestas Kalshi. Accetturo escribió el guion con aportes de Kalshi y utilizó Gemini y ChatGPT para desarrollar los personajes y los diálogos. El anuncio, compuesto por 15 clips, se realizó en solo tres días por $2,000 dólares y se espera que alcance 20 millones de impresiones en diversas plataformas.