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-Editorial
La Junta de Supervisores del Condado Imperial votó el 9 de septiembre para declarar un estado de emergencia económica en respuesta al cierre de la planta de Spreckels Sugar Company, advirtiendo que la pérdida de la última instalación procesadora de remolacha azucarera en California podría tener consecuencias de gran alcance para la economía agrícola y la fuerza laboral de la región.
La planta, ubicada sobre la Carretera 86 entre Imperial y Brawley, fue durante décadas una piedra angular de la industria local de remolacha azucarera. Empleaba directamente a unos 249 trabajadores equivalentes a tiempo completo y sostenía más de 700 empleos en toda la economía regional al considerar la agricultura, el procesamiento y el empleo indirecto, según informaron autoridades del condado.
Al aprobar la resolución, los supervisores destacaron el papel significativo de la planta en el sostenimiento de la economía agrícola del Valle Imperial. Las operaciones de procesamiento generaban un impacto económico anual estimado entre 164.8 millones y más de 865 millones de dólares, dependiendo de las condiciones del mercado, mientras que la agricultura aportaba otros 77.8 millones. En conjunto, la industria representaba aproximadamente 242 millones de dólares en actividad económica anual.
“Este cierre representa una disrupción repentina y severa en la base agrícola y en la fuerza laboral del Condado Imperial”, señaló la resolución. “La pérdida de esta instalación amenaza la estabilidad de las operaciones agrícolas, los empleos locales y los ingresos fiscales del condado”.
Datos del condado muestran que la planta contribuía con más de 549,000 dólares en impuestos prediales cada año, incluidos alrededor de 127,000 destinados directamente a servicios del condado. También generaba cerca de 28 millones de dólares anuales en actividad salarial. Con una tasa de desempleo ya de 16.4% en abril —una de las más altas en California—, los líderes del condado afirmaron que el cierre agrava una situación económica ya frágil.
El cultivo de remolacha azucarera en el Valle Imperial ha promediado más de 23,000 acres anuales en los últimos años, produciendo alrededor de un millón de toneladas de cosecha valorada en más de 57 millones de dólares. Sin una planta procesadora local, los supervisores advirtieron que el futuro del cultivo de remolacha en el valle es incierto.
La resolución instruye al personal del condado a trabajar con agencias estatales y federales, jurisdicciones locales, socios de desarrollo laboral y representantes de la industria para buscar recursos de emergencia y asistencia financiera. También hace un llamado al Departamento de Agricultura de Estados Unidos y al Estado de California a brindar apoyo directo para estabilizar la economía regional y ayudar a agricultores y trabajadores en la transición.
La planta de Spreckels había sido durante mucho tiempo uno de los pocos eslabones restantes de la industria de la remolacha azucarera en California, que se ha reducido en las últimas décadas conforme cerraban plantas procesadoras en todo el estado. Su clausura deja a los agricultores del Condado Imperial sin un mercado inmediato para su cosecha y amenaza con generar efectos en cadena en todo el sector agrícola del valle.
Autoridades del condado señalaron que también buscarán programas de apoyo para trabajadores desplazados y explorarán oportunidades para diversificar la economía regional. “Debemos actuar de manera rápida y colaborativa para enfrentar esta crisis”, subrayó la resolución, enfatizando que la pérdida no es solo económica, sino también cultural, ya que la industria de la remolacha ha sido un pilar de la agricultura del Valle Imperial por generaciones.
La declaración no otorga financiamiento en sí misma, pero busca fortalecer la petición del condado para obtener apoyo estatal y federal.
