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-Editorial
Los largos desplazamientos en automóvil se han asociado durante mucho tiempo con resultados negativos para la salud, y un estudio reciente de Potamkin Hyundai arroja luz sobre la magnitud del problema, revelando que los conductores de larga distancia de California están entre los menos saludables del país. Las prolongadas horas en la carretera contribuyen a un estilo de vida sedentario, aumentando el riesgo de aumento de peso, problemas cardiovasculares y condiciones crónicas como la diabetes y la hipertensión. Este problema se agrava aún más por el estrés, la reducción de la actividad física y la interrupción del sueño.
El estudio combinó datos de salud disponibles públicamente con una encuesta a 3,000 conductores para delinear un perfil de “los conductores menos saludables de Estados Unidos”. Maryland y Arkansas lideran la lista, donde el 92% de los conductores admiten picar comida chatarra durante sus desplazamientos, lo que representa aproximadamente 4 millones de conductores poco saludables en los dos estados.
Los conductores de California también obtuvieron un mal desempeño, ocupando el puesto 15 a nivel nacional en hábitos de conducción poco saludables. Un asombroso 81% de los trabajadores de larga distancia de California consumen regularmente comida chatarra mientras están en la carretera, lo que equivale a aproximadamente 14.8 millones de conductores. Los encuestados informaron consumir un promedio de 420 calorías durante un solo desplazamiento, una cantidad significativa para aquellos con trayectos diarios.
Los cinco estados con los conductores menos saludables son Maryland y Arkansas, donde el 92% de los conductores picotean comida chatarra durante sus desplazamientos, representando 2.86 millones y 1.20 millones de conductores, respectivamente. Mississippi sigue de cerca con un 91% (1.12 millones de conductores), mientras que el 88% de los conductores en Louisiana (1.75 millones) admiten el mismo hábito. Georgia completa la lista, con el 84% de sus 4.2 millones de conductores picoteando regularmente comida chatarra mientras están en la carretera.
El estudio no solo se centró en los hábitos de picoteo, sino que también exploró comportamientos peligrosos asociados con comer mientras se conduce. Un alarmante 68% de los conductores dijo que eligen sus rutas de desplazamiento en función de la disponibilidad de autoservicio de comida rápida. Además, el 44% admitió haber tenido un “accidente alimentario” mientras conducía, lo que causó una distracción o casi llevó a un accidente. Entre los comportamientos riesgosos se incluyeron comer alimentos calientes que podrían derramarse (48%), conducir con las rodillas (32%) e incluso comer con utensilios mientras se maneja (6%).
En cuanto a las razones detrás de estos hábitos, el 53% dijo que come mientras conduce para ahorrar tiempo, mientras que el 21% lo hace para evitar tener demasiada hambre. A pesar de los posibles riesgos para la salud, el 43% de los encuestados declaró que ignorarían el consejo de su médico de dejar de comer mientras conducen.
Los cinco estados con los conductores más saludables, donde picar comida chatarra durante los desplazamientos es menos común, están encabezados por New Hampshire, donde solo el 43% de los conductores admiten el hábito, lo que equivale a 311,248 personas. Utah sigue con un 56% (898,445 conductores), mientras que Connecticut y Nebraska empatan en un 60%, con 1.08 millones y 602,782 conductores, respectivamente. Washington completa la lista, con el 63% de sus 2.35 millones de conductores picoteando comida chatarra durante sus desplazamientos.
El estudio sirve como un recordatorio contundente de los riesgos para la salud asociados con los largos desplazamientos y resalta la necesidad de adoptar hábitos de desplazamiento más saludables.