En un esfuerzo conjunto para promover un ambiente más saludable para las generaciones presentes y futuras de la región Cali-Baja, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y el gobernador de California, Gavin Newsom, inspeccionaron el progreso de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de San Antonio de los Buenos. Esta iniciativa binacional tiene como objetivo evitar descargas contaminantes al océano.
Durante la visita, Ávila subrayó que la gestión del agua es una prioridad para ambos gobiernos. Con el apoyo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, el gobierno federal invirtió 600 millones de pesos en este proyecto esencial, que está siendo ejecutado por el Ejército Mexicano (Sedena). “Debido a la importancia de este proyecto, solicité fondos al presidente López Obrador, quien accedió a asignar recursos federales. La participación de Sedena acelera el proceso, evitando largos trámites de licitación y adquisición mientras garantiza rapidez en la ejecución,” señaló la gobernadora.
También reconoció el compromiso de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para abordar este antiguo tema binacional. Desde 2015, la planta tratadora ha estado fuera de servicio, pero su oportuna rehabilitación permitirá cumplir con las normas nacionales de descarga de agua y los acuerdos binacionales.
Ávila explicó que si el proyecto hubiera pasado por licitación tradicional, tomaría al menos dos años en completarse. La gestión directa de Sedena permitirá que la planta entre en operación en unos meses.
El gobernador Gavin Newsom expresó su reconocimiento por el avance del proyecto y reafirmó su compromiso de trabajar juntos para mejorar la calidad ambiental de las regiones fronterizas.
Víctor Amador Barragán, secretario de Manejo, Saneamiento y Protección del Agua, agregó que una vez rehabilitada, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de San Antonio de los Buenos, ubicada cerca de Punta Bandera, tendrá la capacidad de tratar y reutilizar hasta 800 litros por segundo.