Por: Dr. Elton Gómez, especialista en medicina regenerativa.
¿Recuerdan las viejas impresoras de matriz de puntos, las que había que cargar con un papel continuo, con perforaciones en los costados, que eran ruidosas, caras y muy lentas, y que al final de cada impresión, había que manualmente cortar cada hoja siguiendo las perforaciones hechas en el papel?, estas impresoras, dieron paso a las modernas impresoras de inyección de tinta e impresoras láser, más silenciosas, rápidas, y menos costosas en comparación.
En estos momentos, la impresión 3D, que permite hacer piezas completas con diversos materiales, desde plástico, PVC, hasta metal inclusive, esta al mismo nivel que las antiguas impresoras de matriz de puntos, básicamente es tecnología de “hágalo usted mismo” teniendo cada quien que armar su propia impresora 3D, al recibir un kit, y diseñar pieza por pieza en un programa especializado.
Es así que la tecnología ya ha dado un paso adelante, o mejor dicho un paso en otro sentido, mediante la llamada “bioimpresion”, que en lugar de utilizar materiales inorgánicos, utiliza materiales que son o fomentan la vida, como matriz extracelular, andamios de colágeno, y en algunos casos, células vivas, es también es tecnología que está “en pañales” por decirlo así, pero que ya ha tenido algunos grandes éxitos, como la impresión de válvulas cardiacas hechas a medida, para reemplazar válvulas dañadas, hueso, para reemplazar o agregar hueso a fracturas con pérdida de masa ósea, o andamios para crear vasos sanguíneos en un laboratorio.
Así mismo, la impresión 3D “ordinaria” la que usa materiales no vivos, puede ser usada para imprimir implantes que funcionan como filtros de la sangre, válvulas implantables para casos de hidrocefalia, prótesis funcionales, en combinación con otras disciplinas como la robótica y la cibernética.
En futuro es promisorio, imagina que en el futuro no se tenga que esperar por un trasplante, sino que se pueda mandar imprimir a un laboratorio un riñón directamente o un corazón hecho con un armazón microscópico y células del mismo paciente, es lo que nos espera, pero ya podemos ver atisbos de esta realidad en varios aspectos de nuestra vida.