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Por: Sharay Angulo y Timothy Aeppel
WASHINGTON (Reuters) – Las conversaciones entre México y Estados Unidos para negociar nuevas reglas de la industria automotriz en el marco del pacto comercial del TLCAN están listas para continuar la próxima semana, dijo el ministro de economía de México el jueves, ya que persisten las fricciones sobre las reglas de importación de Los Estados Unidos.
Desde que se reiniciaron el mes pasado, las conversaciones se centraron en resolver las diferencias entre las dos partes sobre la queja del presidente estadounidense Donald Trump de que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte ha debilitado la fabricación de los EE. UU. en beneficio de México.
Trump ha amenazado con retirarse del pacto comercial de 24 años entre los Estados Unidos, México y Canadá si no se vuelve a trabajar para beneficio de los trabajadores de los EE. UU.
Espera reducir el déficit comercial de EE. UU. con México de menor costo y recortar empleos, particularmente en la industria automotriz.
“Estamos en un camino que nos puede llevar al fin de semana y la semana próxima”, dijo el ministro de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, a los periodistas cuando ingresó a las oficinas del representante comercial de Estados Unidos Robert Lighthizer en Washington para conversar el jueves por la tarde.
México y Estados Unidos dijeron que estaban cerca de resolver las cuestiones bilaterales pendientes en la renovación del pacto comercial. Sin embargo, un día antes Guajardo había dicho que las dos partes podrían llegar a un acuerdo en “horas”.
El tono se ha vuelto más cauteloso desde entonces.
“Estamos bien avanzados (pero) todavía no”, dijo Guajardo.
Al salir de las conversaciones con Guajardo más tarde, el canciller mexicano, Luis Videgaray, dijo que las discusiones comenzarán nuevamente el viernes a las 9.30 a.m. hora local en Washington.
Las conversaciones podrían prolongarse debido a puntos conflictivos no resueltos, como las reglas de origen de los autos, destinadas a traer más producción a la región, una propuesta estadounidense que podría matar el TLCAN después de cinco años y mecanismos de resolución de disputas.
Canadá ha estado esperando que los equipos de México y Estados Unidos lleguen a un terreno común antes de volver a unirse a las negociaciones.
DISPUTA ARANCELARIA
La administración de Trump quiere poder imponer aranceles de seguridad nacional a la producción futura de México a partir de nuevas plantas de ensamblaje de automóviles y partes, dicen los funcionarios de la industria automotriz.
Esa demanda ha estado causando fricción en las últimas conversaciones de EE. UU.-México, según una fuente de la industria familiarizada con el proceso, que habló bajo condición de anonimato.
Matt Blunt, presidente del American Automotive Policy Council, también dijo que había habido discusiones sobre productos importados que no cumplen con los nuevos requisitos del TLCAN.
“Realmente no hemos hecho ninguna recomendación al gobierno de los EE. UU. sobre ese tema”, dijo a los periodistas en una conferencia telefónica.
Blunt dijo que se espera que las reglas de contenido automotriz más sólidas que emergen de las negociaciones del TLCAN mantengan a América del Norte competitiva como una base de producción, y que estaba “muy animado” por la dirección de las conversaciones entre Estados Unidos y México.
La amenaza de aranceles del 25 por ciento podría desalentar nuevas inversiones automotrices en México para atender el mercado de los EE. UU.
Una fuente mexicana dijo que México no aceptaría reglas de importación estadounidenses más estrictas en virtud de un nuevo TLCAN que las actuales que prevalecen bajo los compromisos arancelarios de la Organización Mundial del Comercio de los Estados Unidos, que prevén un impuesto del 2.5 por ciento para los vehículos ligeros.
Funcionarios estadounidenses y mexicanos dicen que presionarán por un acuerdo que podría abrir la puerta para que regrese Canadá.
“Tenemos que lograr un compromiso con Canadá y la única forma en que puede suceder es si continuamos durante el fin de semana y la próxima semana”, dijo Guajardo.
El gobierno de Canadá reiteró el jueves que necesitaría estar satisfecho con cualquier nueva regla de origen.
La canciller canadiense, Chrystia Freeland, dijo a los periodistas: “Canadá está claramente interesado en cómo se actualizan esas reglas y claramente necesitaremos ver y aceptar cualquier conclusión final”.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, dijo luego que Ottawa estaba en contacto regular con sus socios del TLCAN y se sintió alentado por el optimismo expresado por Estados Unidos y México. “Estamos trabajando para lograr un buen acuerdo, no solo cualquier tipo de acuerdo”, dijo.
