Por: Ellie Burgueno, Periodista y Escritora
- Por qué el Periodismo Real Requiere Más que Likes y Shares
En la era digital actual, las redes sociales han democratizado la creación de contenido, permitiendo a los usuarios compartir información de manera rápida y extensa. Sin embargo, este fenómeno ha llevado a algunos a confundir los perfiles personales en plataformas como Facebook con los medios de comunicación tradicionales. Esta confusión omite distinciones clave en cuanto a credibilidad, responsabilidad y estructura operativa. Aunque las redes sociales juegan un papel importante en la difusión de información, no pueden reemplazar los estándares periodísticos que rigen a los medios profesionales.
Los medios tradicionales, incluidos los periódicos, revistas y estaciones de radio, operan bajo estrictos estándares editoriales y pautas éticas. Son entidades legalmente registradas con sitios web oficiales, equipos editoriales dedicados y, a menudo, una historia de integridad periodística. Empresas de medios como NBC, The New York Times y The Washington Post han construido su reputación a lo largo de décadas, adhiriéndose a estrictas prácticas periodísticas para garantizar precisión e imparcialidad. Estas organizaciones son responsables ante organismos reguladores y sus audiencias, ofreciendo recursos en casos de desinformación o faltas éticas. Además, la mayoría de los editores y periodistas de estas organizaciones son profesionales capacitados con formación académica en periodismo, reportajes de investigación, escritura e incluso gestión empresarial. Su experiencia, combinada con años de práctica, asegura que la información se mantenga bajo los más altos estándares de precisión, ética y responsabilidad pública.
El Camino de una Periodista: De la Pasión a la Profesión
Mi pasión por la escritura y mi sueño de la infancia me llevaron al periodismo. A lo largo del tiempo, desarrollé mis habilidades periodísticas a través de varios programas educativos, incluidos los de la Universidad CUNY en Nueva York y el Programa de Periodismo Digital de la Universidad de Nueva York. Estos programas me ayudaron a perfeccionar mi arte y transformar mi pasión por contar historias en una carrera profesional. Si bien la formación formal tomó años, la verdadera experiencia ha llegado a través de mi trabajo en redacciones y la adquisición de experiencia práctica. El periodismo no se trata solo de aprender estilos y técnicas de escritura, sino de refinar continuamente las habilidades y comprender la responsabilidad que conlleva moldear la opinión pública.
Después de comenzar a trabajar en mi primer libro en 2007 y acumular años de experiencia en el ámbito legal como Consultora de Inmigración y Traductora e Intérprete Certificada en inglés y español, me sentí cada vez más atraída por el mundo del periodismo. Mi primer paso importante en mi trayectoria ocurrió cuando el director de La Voz de la Frontera, uno de los periódicos regionales más antiguos y respetados de la región fronteriza, me invitó a compartir algunos de mis ensayos. Al elogiarme por mi estilo de escritura poética, me ofreció la oportunidad de escribir una columna semanal la cual titulé Musa Articulada, y que mantuve durante tres años consecutivos sin remuneración. Esta experiencia consolidó mi decisión de ser reconocida como escritora y ayudó a forjar la voz que aún utilizo en mi trabajo.
Con el tiempo, me encontré con numerosos casos de abuso de poder, discriminación y maltrato debido a la falta de información sobre los derechos de las personas. Motivada por el deseo de cerrar esta brecha, decidí lanzar Beyond Borders Gazette. Inicialmente concebido como una gaceta legal, el proyecto fue diseñado para presentar artículos en profundidad de abogados y expertos con el objetivo de empoderar al público. Sin embargo, a medida que la publicación crecía, ampliamos su contenido, diversificamos su cobertura e incorporamos anuncios para garantizar su sostenibilidad, asegurándonos de que se mantuviera gratuita para los lectores.
La Brecha Digital: Redes Sociales vs. Periodismo Profesional
Existen diversas formas en que numerosas publicaciones serias han iniciado su camino, pero es importante destacar que, a diferencia de los rigurosos procesos editoriales que siguen las organizaciones de noticias profesionales, una página de Facebook es un perfil generado por el usuario que permite a individuos o grupos compartir contenido sin ningún tipo de supervisión. Aunque algunos influencers han logrado acumular grandes audiencias y difundir noticias, su contenido carece del proceso de validación que es estándar en las salas de redacción de medios establecidos. Un estudio de 2024 realizado por el Pew Research Center reveló que el 54% de los adultos en EE. UU. obtienen sus noticias a través de plataformas de redes sociales, siendo Facebook una fuente principal. Sin embargo, el mismo estudio señaló que los usuarios a menudo se enfrentan a noticias unilaterales o inexactas en estas plataformas, lo que genera preocupaciones sobre la fiabilidad de la información que se difunde a través de estos canales.
El peligro de la desinformación se ve amplificado por la falta de responsabilidad. A diferencia de las organizaciones de noticias que deben adherirse a las leyes de difamación y a la ética periodística, los influencers de redes sociales y las páginas independientes operan sin consecuencias directas por difundir información falsa. Esta distinción subraya por qué las páginas de redes sociales no deben confundirse con fuentes legítimas de noticias.
El Factor Elon Musk: Destrozando el Periodismo Tradicional
La adquisición de Twitter por parte de Elon Musk y su cambio de marca a X han difuminado aún más las líneas entre las redes sociales y las fuentes legítimas de noticias. Musk ha sido vocal en sus críticas a los medios de comunicación tradicionales, utilizando su plataforma para promover la idea de que las redes sociales pueden reemplazar al periodismo tradicional. Por ejemplo, ha atacado repetidamente a NPR y a otros medios tradicionales, alentando a las personas a desconfiar de las fuentes de noticias convencionales. Su influencia ha tenido consecuencias reales; la percepción de la marca Tesla en Europa se ha visto gravemente afectada debido a su alineación con narrativas políticas de extrema derecha, lo que llevó a una caída del 45% en las ventas de Tesla en Europa a principios de 2025.
El intento de Musk de posicionar a X como una plataforma principal de noticias es problemático porque el periodismo es una profesión que requiere educación, formación y estándares éticos. Así como la ingeniería, la medicina y la administración de empresas requieren años de estudio y experiencia, el periodismo demanda experiencia en investigación, verificación de hechos y reportajes responsables. La mayoría de los periodistas profesionales pasan años perfeccionando su oficio en instituciones académicas y ganando experiencia real en las salas de redacción antes de convertirse en editores o publicistas. Al ignorar estos principios y alentar al público a confiar en fuentes no verificadas de redes sociales, Musk pone en peligro la base de la integridad periodística y la confianza pública en la información veraz.
Las Redes Sociales como Herramienta de Apoyo
Si bien las redes sociales no deben reemplazar el periodismo tradicional, pueden servir como una herramienta valiosa para las organizaciones de medios. Los medios establecidos utilizan plataformas como Facebook, TikTok y X para llegar a audiencias más amplias e interactuar con los lectores en tiempo real. Por ejemplo, las empresas de medios tradicionales se han adaptado a la creciente influencia de TikTok entre los públicos más jóvenes compartiendo noticias confiables en formatos breves. Sin embargo, estos esfuerzos no reemplazan los rigurosos procesos editoriales que garantizan la fiabilidad de su contenido.
El diario La Vanguardia de España recientemente dejó de publicar en X debido a preocupaciones sobre la desinformación y las teorías de conspiración que proliferan en la plataforma. Este movimiento refleja el creciente reconocimiento de que las redes sociales, sin una estricta moderación de contenido, pueden convertirse en un terreno fértil para la desinformación más que en una fuente confiable de noticias.
La revolución digital ha proporcionado un acceso sin precedentes a la información, pero también ha aumentado el riesgo de desinformación. Si bien las redes sociales han revolucionado la comunicación, comparar una página de Facebook con una revista legalmente registrada y acreditada pasa por alto diferencias fundamentales en cuanto a credibilidad, responsabilidad e integridad operativa. Reconocer estas distinciones es crucial para mantener un público informado y consciente. El periodismo no es un pasatiempo; es una profesión que requiere habilidad, ética y dedicación a la verdad. Como consumidores de información, debemos mantenernos vigilantes y priorizar fuentes confiables sobre el atractivo fugaz del contenido viral.