Contribución especial: Mtra. Flor de Jazmín Fierro Silva, candidata a Doctora en Administración Pública, Maestra en Derecho Corporativo y Especialista en Derecho de la Empresa Y Derecho Constitucional. Versión en inglés en colaboración con Mtra. Terry Ahtziry Cárdenas Banda, abogada corporativa, internacionalista, catedrática, altruista y activista social.
Al pasar de los años la problemática del agua se agudiza, si bien es cierto que el planeta tierra cuenta con 97.5% de agua también lo es que el 2.5% solo es agua dulce, es decir para consumo humano. Diversos autores mencionan que el agua es el nuevo oro y que las disputas inclusive de índole bélico serán por este preciado recurso, que no debemos de olvidar que es necesario orgánicamente para la vida del ser humano, el crecimiento natural del entorno humano, el desarrollo de un país, la producción de alimentos, etc.
En este sentido en la publicación de la Agenda 2030 aprobada en septiembre de 2015 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, se incluye en el objetivo Sexto al recurso hídrico como una prioridad para los gobiernos ajustar sus sistemas legales y articular políticas públicas que garanticen el derecho humano al agua a la población. Este objetivo se denomina “Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos. Que a su vez se encuentra subdividido en 8 metas que cada una cuenta con indicadores que sirven para realizar una evaluación objetiva a los países miembros y determinar áreas de oportunidad a mejorar después de la evaluación.
México y Estados Unidos compartimos a nivel regional una serie de cuencas hidrológicas por el cauce natural de los ríos Bravo, Colorado, Río Tijuana, entre otros. Entiéndase por cuenca hidrológica a la unidad del territorio, delimitada por un parte aguas o divisoria de las, en donde ocurre el agua en distintas formas, y ésta se almacena o fluye hasta un punto de salida que puede ser el mar u otro cuerpo receptor interior; Por esta razón los problemas de escasez y saneamiento del recurso hídrico se convierten en problemáticas binacionales que tienen un régimen jurídico particular.
El tratado de límites y aguas de 1944 establece la asignación de aguas que le corresponden a los respectivos países ya que los cuerpos de agua (Colorado y Bravo) nacen en territorio estadounidense y desembocan en territorio mexicano. Estas asignaciones se modifican conforme los volúmenes de agua disminuyen o aumentan y cada caso hipotético cuenta con cálculos establecidos, sin embargo, cuando se realiza este cambio en la asignación de los volúmenes de agua se firman actas de conformidad de las partes, una especie de adendum al tratado. El tratado establece la creación de un órgano especializado binacional para dar seguimiento a lo establecido en el mismo denominado Comisión Internacional de Limites y Aguas entre México y Estados Unidos, en donde cada país cuenta con su sección para atender la problemática interna y posteriormente negociarla con la contra parte. Cada sección está dirigida por un Comisionado ingeniero designado por el presidente de su respectivo país.
A la fecha se estima que ambos países han firmado alrededor de 328 actas, las cuales en su contenido pactan volúmenes de agua, inversión bipartita a infraestructura hidráulica, financiamiento a infraestructura mexicana a manera de préstamo. Los conflictos binacionales más populares en la última década son el encementado del canal todo americano, derrame de aguas negras de la ciudad de Tijuana a San Diego, entre otros, todos ellos son resuelto a la luz de lo que dicta el Tratado de 1944, intervención de grupo de expertos binacionales, la realización de estudios y concluyen con la firma de un acuerdo o adendum denominado acta.
Como se mencionó al inicio del presente artículo el agua es trascendental para la vida, su escasez está provocando una gran movilización internacional para su preservación la creación de órganos binacionales, instrumentos jurídicos y políticas públicas. Por esta razón debemos de comenzar a tomar medidas desde casa para su uso eficiente y racional.